Este trabajo de investigación explora la enseñanza de la música a través del análisis y la improvisación, desafiando el enfoque tradicional centrado en la lectura de partituras. A lo largo de cuatro cursos, se ha observado que los métodos pedagógicos convencionales en la enseñanza de la trompeta, especialmente en las enseñanzas elementales de música, tienden a formar intérpretes técnicamente competentes, pero con limitadas habilidades para crear música propia.
Mediante la inclusión de prácticas de análisis e improvisación desde el primer curso de enseñanzas elementales de música, los alumnos no solo desarrollan habilidades técnicas, sino que también adquieren una comprensión profunda de los elementos musicales, lo que les permite aplicar los conocimientos de manera práctica y creativa. La investigación se llevó a cabo en la escuela comarcal de música de «Joventuts musicals de la Vall d’Albaida» en la Comunidad Valenciana, con una muestra de 14 estudiantes de entre 8 y 14 años.
Los resultados obtenidos destacan la viabilidad y los beneficios de integrar el análisis y la improvisación en el currículo desde los primeros años de educación musical, promoviendo una formación más completa que favorece la autonomía, la creatividad y la confianza en los estudiantes. Este enfoque no solo enriquece el aprendizaje musical, sino que también potencia la expresión artística y personal, dotando a los alumnos de herramientas para transmitir sus conocimientos y sentimientos de manera única.